A menudo ocurre que la mayoría de la gente, atraida por el mundo espiritual, asiste a charlas y cursos de yoga, de meditación, a conferencias espirituales y a retiros, esperando oír hablar de temas cargados de misticismo y misterio, de ángeles, de mundos astrales, de seres luminosos, de guardianes, de archivos, etc. Sin embargo, la espiritualidad, ni es un super mercado (aunque a veces lo parezca), ni consiste en alimentar nuestro ego con datos, formaciones e información que, como mucho, satisfarían nuestra imaginación y ansia intelectual. Lejos de todo esto, la espiritualidad es un trabajo interno, es el estudio de si-mismo y radica en comprender tu verdadera naturaleza e integrarla en cada momento de tu vida. No se trata de realizar distintas acciones que nos ayuden a ser plenos, libres, ilimitados y eternos, sino de entender que nunca hemos dejado de serlo. Esto es kriyā yoga.
Kriyā yoga es un estilo de vida. Es un camino ancestral hacia el despertar de tu verdadera naturaleza. Fue descrito por el Rishi Patanjali en un tratado conocido como “Yogasutras” de la siguiente manera:
“tapaḥ svādhyāya īśvarapraṇidhānāni kriyāyogaḥ”
– Tapas, auto-disciplina. Tapas indica constancia y motivación en la práctica, lo cual ayuda a la consecución de varios de los principios del aṣṭānga yoga de Patanjali (yama, niyama, āsana, prānayāma)
– Svādhyāya, una vida de estudio de uno mismo y del conocimiento de las enseñanzas transmitidas por el linaje de los maestros a fin de obtener auto-conocimiento, de conocer el conjunto de valores y actitudes adecuadas para la madurez de la persona (en el aṣṭānga yoga se puede decir que hablamos de pratyāhāra, dhāraṇā)
– īśvarapraṇidhānāni indica el reconocimiento de que lo divino reside en nuestro interior, la apreciación de Dios en cada respiración y en un nivel más profundo la entrega al mismo (en el aṣṭānga yoga se puede decir que estaría compuesto de dhyāna y samādhi)
Estos tres niveles incluyen a los tres mārgas (caminos) clásicos del la visión védica:
– Karma mārga (Tapas)
– Jñāna mārga (Svādhyāya)
– Bhatki mārga (Isvara Pranidahana)
Por eso se dice que kriyā-yoga es un sistema completo que, incluyendo los tres caminos clásicos, en realidad conforman uno solo. Suele haber escuelas que dividen estos caminos como separados y exclusivos, pero no es así en la visión del kriyā-yoga, ni en la de los Yoga Sūtras ni en la visión de la Bhagavad Gītā. Los tres caminos se entremezclan y son necesarios. Sin karma yoga es decir, una vida de disciplina, de observación de dharma, de cumplimiento de los propios deberes, de apreciación de Ishvara (Dios) como dador de las leyes que producen los resultados, sin esta preparación no es posible que la persona madure y si no hay madurez, no hay conocimiento y comprensión, y por tanto el Jñāna (conocimiento) no se da y aún menos, Bhatki que requiere primero madurez, y comprensión. La devoción sin comprensión, sin discriminación y sin madurez no puede ser una devoción completa.
Para conseguir esto, kriyā-yoga emplea un conjunto de técnicas de meditación basadas en la respiración, el cerebro y la columna vertebral que, primero, te ayudan a asentar y dirigir tu atención y, segundo, a unir la mente consciente y atenta a la fuerza vital latente en la respiración, permitiendo con la práctica constante transformar y eliminar los condicionamientos e identificaciones mentales que impiden alcanzar el autoconocimiento, la autorrealización, Mokṣa.
Sin embargo, describir kriyā-yoga con palabras tiene poco sentido. Únicamente se puede comprender a través de la práctica. Si deseas saber qué es una manzana, una simple descripción no es suficiente. Coge la fruta, tócala, huélela, mírala y degústala, entonces comprobarás lo que habías oído sobre ella e inmediatamente comprenderás qué es una manzana. Con el kriyā-yoga sucede exactamente lo mismo.
En nuestra tradición, para comenzar la práctica de kriyā yoga es necesario recibir una iniciación previa de un maestro espiritual capacitado. La iniciación consiste en un trabajo energético que el maestro realiza en los centros sutiles (chakras) del discípulo, liberando y abriendo a su vez diversos canales.
Nuestros Maestros:
Swami Shankarananda Giri Nació en 1946 en la provincia India de Orissa, fue iniciado en la ciencia de kriyā-yoga a la temprana edad de 12 años, trasladándose a vivir poco después al ashram de Swami Shriyukteswar, el Karar Ashram, en Puri.
A través de su vida ha experimentado cada paso de las enseñanzas del Yoga. Enseña kriyā-yoga desde el año 1974.
Es discípulo de Paramhansa Hariharananda y de Swami Narayana Giri, quien fue uno de los discípulos más cercanos a Shriyukteswar, a quien sirvió inseparablemente durante más de 20 años. Swami Narayana Giri, más conocido como “Prabhuji”, le instruyó en los más altos grados de kriyā-yoga, transmitiéndole también la técnica de astrología desarrollada por Shriyukteswar, “Astrología Cósmica”, de la cual es uno de los únicos exponentes hoy en día.
Serge Vallade nació en Francia en 1952.
A la edad de 18 años, vivió una experiencia interior que le llevó a adoptar el yoga como estilo de vida. Se graduó en L´Ecole Normale de Yoga de Maud Forget, y comenzó a impartir clases de yoga en 1979. Unos años después se encontró con Swami Shankarananda Giri que se convertiría en su maestro, y a partir de entonces comenzó una nueva etapa en su vida. Con él encontró sus raíces espirituales.
A partir de 1991, Swami Shankarananda Giri puso toda su confianza en él para transmitir Kriyā-Yoga. 8 años más tarde Serge comenzó a iniciar en kriyā-yoga a las personas interesadas en conocer esta ciencia.
Serge es el fundador de la asociación Kriya Yoga Sharanam creada para propiciar la difusión del kriyā-yoga de acuerdo con el linaje de Swami Shankarananda Giri.
Como Kriyā Acharya, Serge Vallade inicia en este sendero y dirige retiros en Francia, India, Nueva Caledonia y Andalucía.
También es autor de los libros, “Léspirt dans la joie du corps, seis sesiones progresivas para iniciarse en Hatha-yoga”; “Kriyā-hatha-yoga, un manual de prácticas para Kriyabanes”; “Hatha-yoga Sadhana”, series Jagannath para principiantes; “Yogamaya” Un maravilloso cuento sobre la espiritualidad del yoga y “Mantras”, una atractiva recopilación de canciones devocionales, mantras y oraciones.
Además habitualmente, Serge, da clases de kriyā-hatha-yoga en el Cercle du Yoga Jagannath en el distrito 11 de Paris. El kriyā-hatha-yoga comparte las posturas o asanas utilizadas en el Hatha-yoga clásico. Solo la metodología y la finalidad son diferentes.
Tanto Valentina como yo hemos tenido la gran fortuna, primero, de conocer a nuestro maestro y haber sido iniciados por él en este sendero y, segundo, de recibir el privilegio y la responsabilidad de iniciar y enseñar Kriyā-Yoga. Por eso hemos creado la Asociación Kriyā-Yoga Sādhanam y ofrecemos a aquellas personas sinceras que lo deseen, la iniciación en Kriyā-Yoga, la enseñanza de sus técnicas y nuestra capacidad para escuchar. Un domingo al mes, el grupo de Kriyabanes de Cádiz se reúne para la meditación colectiva de 1º kriyā. También, desde Biocentro Shantala ofrecemos nuestras clases de kriyā-hatha-yoga en distintos horarios y días que puedes consultar en horarios y actividades.
Que todo te sea propicio.